martes, 24 de diciembre de 2013

Así somos los Virgo

Virgo Fase 0
Cuando están saliendo de una relación.
La situación va a depender de si fueron dejados, o ellos dejaron a la otra persona.
Si los abandonaron no les gusta dejar cosas inconclusas, por lo cual tienden a querer volver con su ex tarde o temprano. Nunca olvidan sus relaciones.
Si ellos fueron los que dejaron al otro hay más posibilidades de superarlo, pero igualmente hay que andarse con cuidado ya que digan lo que digan, (pueden arrepentirse) siempre tardan  bastante en cortar el lazo que los unió a esa persona con la que compartieron su vida.

Virgo Fase 1
Cuando se sienten atraídos por alguien.
Normalmente observan desde lejos, es muy raro que utilicen el ataque frontal para la seducción porque parten de la base de que no tienen que demostrarle nada a nadie ya que se les quiere por lo que son y no por lo que hacen o dicen.
De todos modos, cuando se sienten atraídos por alguien, se mantienen en una segunda línea, actuando de forma analítica y lanzando dardos frases con cierta ironía y sarcasmo. En cualquier caso, en esta fase van dejando ver que son seres incomprendidos y llenos de pudor sexual.
En esta fase normalmente se muestra cercano, simpático, divertido, amable y locuaz, queriendo indagar en los gustos e intereses de la persona que les gusta.
Quiere llamar la atención y lo logra. Lo normal es que lo demuestre de una forma más bien práctica, van dejando caer sus rasgos aquí y allá mediante hechos más que con palabras, haciendo pequeños favores, gestos, detalles. Van haciendo mella en el otro y al mismo tiempo demuestran cierta timidez emocional e indecisión a la hora de lanzarse.
Esto es adrede para que luego sea la otra la que le aborde. Necesitan que sea la otra persona la que dé el primer paso para poder continuar.

Virgo Fase 2
Cuando la presa está en su órbita.
Esto es, girando literalmente alrededor suyo. Le va a recordar que NO es quien ha intentado seducirla y utilizando su gran capacidad de convicción le hará creer a su presa que es ella quien le seduce.
Su habilidad de seducción es tal que jamás va a abordar a su presa, sino que va a conseguir que sea ésta la que le aborde en primer lugar.

(¿Les suena conocido?).

En cualquier caso, si se produjo la conexión inicial, se recomienda atacar como quien se deja seducir.
Para entrarle a un virgo: despacito pero seguro.
Prefieren ser conquistados a conquistar. La otra persona debe tomar la iniciativa en las maniobras de acercamiento. Pero olvidándose de brusquedades y prisas. Hay que acercarse a ellos de forma lenta, gradual, para provocar que fluyan así los sentimientos de amor de forma natural.
No desesperes, pues aunque esté loco por tus huesos hará todo lo posible para que no se le note demasiado, hasta que no esté completamente seguro.

Virgo Fase 3
Inicio de una relación de mayor intimidad emocional con la persona en cuestión. 
El corazón de un virgo demuestra lo que siente a su manera, sabe muy bien guardarse su lado más cálido hasta que no está seguro de que la pareja que está a su lado es la correcta y le sabe entender.
Si esta no lo invade y sabe mantener las distancias, todo irá bien, de lo contrario el virgo entrará irremediablemente en fase 4.

Virgo Fase 4
Desaparición.
Virgo no soporta que le agobien. Le cuesta dejarse llevar, liberarse de las tensiones y frustraciones acumuladas. Se suele sentir  vulnerable.
Cuando un virgo se siente acorralado, agobiado o preocupado, huye.
Técnicamente se esfuma durante un periodo de tiempo y entra en un mundo paralelo donde sopesa, mide, pesa, compara y saca conclusiones de todo lo que le rodea.

Todo tiene que ser claro en su mente para poder seguir adelante. Todo tiene que estar bajo su control y entendimiento. Odia la desestabilidad.

Puede que se sienta en peligro, inseguro, aterrado: Recordad que a lo que más le temen los virgo es a sufrir por amor.

Se entregan en cuerpo y alma cuando aman y si llegasen a ser correspondidos con la misma intensidad se les rompería el corazón.

Tras el desamor, quedan deprimidos, hechos una piltrafa humana durante meses sin encontrarle sentido a la vida. Ellos lo saben, por eso es que se protegen tanto de sufrir a causa de esto.

Virgo Fase 5
Vulnerabilidad
Ocurre cuando se sienten presionados u oprimidos.

Según el caso pueden llegar a escenas de violencia, normalmente verbal. Mejor dejarles libres, solos. No arrinconarles. Esta fase es delicada, pero se les pasa pronto, sólo hay que dejarles su tiempo y su espacio.

Virgo en Fase 6
Amor en estado puro.
Debajo de esa apariencia de “duro” se esconde un corazón romántico casi incurable.
En esta fase el virgo ya está seguro de su amor y será capaz de trepar el monte más alto por alcanzarlo, nada le detendrá. Y hará lo imposible porque la relación funcione, esforzándose cada día por la felicidad de ambas personas.

Entregará lo mejor de sí mismo y respetará a su pareja en todos los aspectos.
El virgo se sentirá seguro de sí mismo y de su valor personal. Espiritual, pasional y muy romántico.

A un virgo sólo debes proporcionarle grandes dosis de seguridad y confianza. Entonces su corazón detallista y personal se abrirá para acoger un amor súper leal y muy auténtico.

domingo, 22 de diciembre de 2013

Admitiendo defectos.

Borde. Sí, soy borde, no lo niego. Cuando alguien comienza a conocerme es lo primero que dejo ver de mi. Mi peor cualidad y mi mejor coraza. Pocos son los que se quedan a ver todo lo que hay detrás, pero los que se quedan (no son muchos), se dan cuenta de que no soy así, o al menos no sólo soy asi.
Y es que estoy llena de trampas. 
Realmente soy al contrario de como aparento en un principio. Parezco fuerte, pero no es más que otra mentira. Parece que tenga un autoestima por las nubes, cuando en realidad no está tan arriba. No hace falta quedarse mucho tiempo para percatarse de todo esto.
Soy totalmente impredecible, como una tormenta en medio del verano. Soy la chispa de energía que necesitas por la mañana. Soy muy protectora para los míos y como amiga soy leal, siempre estoy si me necesitan. Soy clara y transparente como el cristal. No miento, no porque no sepa, si no porque después no me siento bien conmigo misma. A veces creo que tengo exceso de sentimientos y que por eso mi corazón está lleno de remiendos y cicatrices. Creo que soy demasiado buena, demasiado emotiva y eso me ha acabado pasando factura. 
No me gusta aprovecharme de la gente, ni que se aprovechen de mi. De los hipócritas y de los falsos sólo quiero una cosa: distancia. Soy muy desconfiada con todo el mundo. Soy risueña, prefiero sonreír aunque esté rota por dentro. A veces parezco fría, me cuesta abrirme a gente nueva. 
Adoro a los animales, siento especial fascinación por los felinos, con los que me siento identificada. Creo en el amor como motor de todas las cosas. Creo en el poder de las palabras. En el poder de una mirada. Y en el poder de un abrazo. 
Creo que el silencio está infravalorado. 
Soy impaciente para algunas cosas, pero tengo claro que lo bueno tarda en llegar. Soy autoexigente y ambiciosa. Soy vanidosa. Me encanta el sexo. Soy testaruda. Soy idealista para el amor y realista para todo lo demás. No me suelo dar por aludida, me gustan las cosas claras y directas. Soy bastante negativa, aunque si quiero algo lucho hasta el final para conseguirlo. Me gusta imponer y provocar. Soy muy sentimental, una romántica empedernida. Me gusta que me hagan sentir única. Soy muy quejica, pero sólo lo hago para molestar, para bromear. Por lo general soy bastante adaptable a las circunstancias y a las personas. No me enorgullezco de mi físico y sé que tengo mil defectos de carácter para cambiar. O mejorar, mejor dicho. Lo cierto es que soy bastante cambiante en cuanto a humor. Necesito alguien que me proporcione algo de estabilidad, que me haga sentir bonita y me trate siempre como merezca, ni mejor ni peor, sencillamente como merezca. Necesito que me cuiden, como yo lo hago, alguien que se preocupe de si estoy bien o no, aunque después sea muy probable que ni me apetezca contarlo, pero me gusta saber que hay alguien que se preocupa por mi. 
Soy muy orgullosa. Soy muy sincera, tan sincera que a veces hasta hago daño, puedo llegar a perder el tacto, pero siempre lo he preferido antes que las mentiras. 
Soy hiperactiva, no paro quieta, soy bastante nerviosa. Soy muy ilusa, creo en las personas y en las oportunidades, de ahí que me haya llevado tantos palos. 
Soy bastante quisquillosa, perfeccionista, si hago algo me gusta hacerlo bien, por eso me tomo mi tiempo. Me gusta ser precisa, exacta, equilibrada, un yin-yang. Soy reflexiva y calculadora, como el hemisferio izquierdo del cerebro. Nunca arriesgo nada sin pensarlo dos veces o mil. Soy terca y testaruda y soy bastante defensora para lo mío, de ahí que sea bastante celosa. 
Soy de personalidad firme y constante, nunca me ha importado la opinión de gente que ni me va ni me viene, sin embargo alguien que de verdad me conozca, sabe como hundirme fácilmente, pues soy muy sensible y lo que me digan esas personas me afecta en gran medida. 
Me encanta que me miren a los ojos. Me gusta jugar a fútbol. Me gusta bailar. Y perderme con la bici por lugares nuevos. Adoro los abrazos inesperados por la espalda. Estoy enamorada de mi perro, no sé que haría sin él. 
Hay momentos en que necesito estar sola, en que me molesta hasta mi propia sombra y a veces daría lo que fuera por un poco de compañía. Me gusta cantar cuando nadie me escucha. Soy muy de crear monólogos en mi cabeza y luego no digo ni la mitad de lo que pienso. Me vuelven loca las caricias lentas con sentimiento. Y los besos interminables. Me gusta la adrenalina y la velocidad. Tengo debilidad por el chocolate. Soy muy pasional, muy ardiente. Por lo general hago caso a mis instintos y me gusta dejar desconcertada a la gente. Me gusta impresionar. Me gusta dejar el listón insuperable. Soy muy agradecida. 
Suelo utilizar bastante la ironía y el sarcasmo de forma natural. Me entrego por completo a lo que creo que me conduce a algo mejor. Soy muy temperamental. Soy cariñosa. Soy valiente y decidida. Me considero inteligente. Muy meticulosa y ordenada, sistemática. Métodica, lógica, estudiosa y meditadora. 
Me gusta ser el centro de atención. Me gusta que me miren y causar fascinación. Soy bastante complicada hasta que aprendes a llevarme. Soy extremadamente detallista, me fijo hasta en lo que la gente pasa por alto. 
Suelo ser introvertida, mis sentimientos sólo los conozco yo, pero sí que cuento lo que me pasa cuando la situación me supera. Me irritan las distracciones. Soy muy trabajadora, no me da pereza esforzarme por algo que crea que vale la pena. No me puedo quedar callada ante las injusticias. Soy muy empática, no me cuesta ponerme en la situación de otra persona y me gusta ayudar siempre que puedo.De hecho puedo ayudar a resolver los problemas de terceros con una habilidad y sensatez que muchas veces falta en mis propias relaciones personales. 
Soy muy afectiva. Soy muy intuitiva. Mi cabeza suele ir más rápido que yo, suelo montarme películas y rallarme con facilidad.
Y para terminar diré que soy única, inimitable, que no hay nadie como yo ni la habrá nunca, por suerte o por desgracia.

Numerología: 7

Horóscopo: Virgo

miércoles, 18 de diciembre de 2013

La fuga

 Triste, 
como el perro en la autopista,
como una tortuga con prisa,
como una monja en un burdel.

Solo,
como cuando tú te fuiste,
como cuando no te rozan
unos labios de mujer.

Hoy me he vuelto a ver…

Absurdo,
como un domingo por la tarde,
como las balas por el aire,
como el puto despertador.

Inútil,
como los besos que no diste,
como un cuerpo que se viste
cuando me desnudo yo.

Y ahora que voy más solo que la luna
negociando gasolina para este amanecer.

Ya ves, voy buscando en la basura
unos labios que me digan: "esta noche quédate".

Como un borracho en el desierto,
como una princesa en el metro,
como un reo sin voz.

Como una navidad sin techo,
como un delfín en el mar muerto,
como la lágrima que moja tu colchón.

Vacío,
como el corazón del rico,
como el bolsillo del mendigo,
como los besos de alquiler.

Confuso,
como una noche sin abrigo,
como las frases que ya no te escribo
pa’ que vuelvas otra vez.

Buscando en la basura - La fuga

Para no verme tan solo me olvide del olvido.
¿Quién no busca calor?
Para no verte tan sola te viniste conmigo.

Para ahuyentar las tormentas: ni sin ti, ni contigo.
Conflicto sin solución.
Para encontrarme deprisa si me encuentro perdido.

Amor de contenedor,
que siempre calienta el alma cuando acuden penas
y empieza el cuchillo a rozar mis venas.

Tú nunca dices sí, yo nunca digo no.
Tú duermes con la luna, yo duermo con el sol.

Para curar los inviernos, para lamer las heridas.
Para volverme más loco me he colado en tu vida,
aunque me cueste la mía.

Para vivir una guerra sin cuartel ni salida.
Para enterrar por un tiempo esta "melancoholia"
que encharca mis pupilas.

Amor de contenedor - La fuga



viernes, 13 de diciembre de 2013

Consecuencias.

En ocasiones tienes que decidir entre arriesgar o cruzarte de brazos. 
Yo siempre he sido más partidaria de la primera opción, pero a cambio he tenido que aprender a aceptar las consecuencias, pues no siempre sale todo bien. 
El nuestro es un amor atropellado, que desde el primer momento se sabe que no va a ningún sitio, pero que no puedes controlar. Un querer y no poder.
Sin embargo, no puedo hacer otra cosa más que adorarte cuando me miras con tanta fascinación o cuando me sonríes medio sonrojada. Cuando te pones nerviosa al hablarme o cuando me buscas con cualquier tontería. Me desconcertaste, me causaste curiosidad y me acabé fijando en ti, a estas alturas de nada sirve mentir. Pero eras sólo una persona más, con la que te ríes, que te parece simpática y que te cae bien. Mas nunca pensé que llegaríamos a acercarnos, a conocernos mejor. Me llamó especialmente la atención tu sonrisa, que siempre estuvieras sonriendo, ese desparpajo tuyo y que fueses un poco a tu bola, pero realmente estando pendiente de todo. Me atrajo tu inteligencia como lo que más, tus interesantes temas de conversación, tu sentido del humor, tus bromas, tus piques, ese tono tan tuyo conmigo... sin embargo, ninguna de esas cosas podía hacer que me calentase la cabeza de tal manera que llegase a poner en peligro mi integridad como persona...o al menos eso pensaba yo.


martes, 10 de diciembre de 2013

No me sonrías que me la lías

Lo cierto es que llevaba algún tiempo deseando confesar algo. Hay una sonrisa que me pierde. Sí, la suya. La veo sonreír, escucho su risa y entonces el mundo se detiene. No importa nada más, consigue acaparar toda mi atención. Suspiro, deseo ser causante de ese magnifica acto. No importa cuántas veces la vea, siempre me roba el corazón. Cada vez que sonríe vuelve a fascinarme como si fuera la primera vez.
Dicen que la revolución del amor comienza con una sonrisa. Supongo que me delata. A veces incluso pienso que puedo parecer gilipollas, pues me quedo realmente embobada mirándola, escuchándola, es algo que escapa a mi control. Y cuando soy yo quien se las provoca no puedo sentirme más completa, más feliz. No puedo evitar pensar: Oh dios, si es que es preciosa. Jamás debería borrársele de la cara, por nada ni por nadie. Su sonrisa es sincera, sencillamente perfecta.
Házme un favor y no me dejes nunca sin esa sonrisa tan maravillosa, pues todo el vacío de mi vida lo llenas con eso. 

No comienza mi día con la alborada sino con tu sonrisa desatada.

Sonríe pequeña.

jueves, 7 de noviembre de 2013

Yo he sido tan feliz contigo

Tal vez porque esta noche
no vaya a ser lo que se dice
una noche inolvidable… no por ti.
La culpa es mía por fingir que todo me da risa
y que la culpa es de la prisa o es del frío,
pero vamos… que yo sé que es culpa mía.

Que curioso es el silencio,
no sé qué es lo que es,
pero hay algo en nuestras vidas
y en esta noche yo enloquecería
si al amanecer te fueras sin haberte dicho:
que yo he sido tan feliz contigo.


A veces sueño que no amanece, que nos perdemos,
y un firmamento de estrellas me da el aliento
que lo oiga el mundo entero:

yo he sido tan feliz contigo”.

miércoles, 6 de noviembre de 2013

¿Cómo manejas la adversidad?

 Una hija se quejaba a su padre acerca de su vida y de lo difíciles que le resultaban las cosas día a día. No sabía cómo hacer para seguir adelante y a veces hasta creía que se daría por vencida. Estaba cansada de luchar, desganada. Parecía que cuando solucionaba un problema, aparecía otro mayor.
Su padre, un chef de cocina, la llevó a su lugar de trabajo. Allí llenó tres ollas con agua y las colocó sobre el fuego. Pronto el agua de las tres ollas estaba hirviendo.
En una colocó zanahorias, en otra colocó huevos y en la última colocó granos de café. Las dejó hervir sin decir palabra.
La hija esperó impacientemente, preguntándose qué estaba haciendo su padre.

A los veinte minutos el padre apagó el fuego. Empezó sacando las zanahorias, luego los huevos y por último el café.
Mirando a su hija le dijo: “Querida, ¿qué ves?”. 
“Zanahorias, huevos y café” fue su respuesta.
Le hizo acercarse y le pidió que tocara las zanahorias. Ella lo hizo y notó que estaban blandas. Luego le pidió que tomara un huevo y lo rompiera. Después de quitarle la cáscara, observó que el huevo estaba duro. Luego le pidió que probara el café. Ella sonrió mientras disfrutaba de su rico aroma.
Humildemente la hija preguntó: “¿Qué significa todo esto padre?”.
Él le explicó que los tres elementos se habían enfrentado a una misma adversidad: el agua hirviendo. Sin embargo, habían reaccionado de forma diferente.

La zanahoria llegó al agua fuerte, dura. Pero después de pasar por el agua hirviendo se había vuelto débil, fácil de deshacer.
El huevo había llegado al agua frágil. Su cáscara fina protegía su interior líquido. Pero después de estar en agua hirviendo, su interior se había endurecido.
Los granos de café sin embargo eran únicos. Después de estar en agua hirviendo, habían cambiado al agua.
“¿Cual eres tú?”, le preguntó a su hija. “Cuando la adversidad llama a tu puerta, ¿cómo respondes?. ¿Eres una zanahoria, un huevo o café?”.
Y ahora, dime ¿Cómo eres tú? ¿Eres una zanahoria que parece fuerte al principio pero cuando la adversidad te toca, te vuelves débil y pierdes tu fortaleza?, ¿Eres un huevo, que comienza con un corazón maleable, que posee un espíritu fluido, pero después de la adversidad te vuelves duro y rígido?¿O eres como los granos de café que aunque parezcan duros y amargos cuando llega una adversidad hacen que las cosas a su alrededor mejoren?.


Cuando habla el maestro, el alumno calla, escucha y aprende.


Esta mañana desperté emocionado con todas las cosas que tengo que hacer antes que el reloj sonara.
Tengo responsabilidades que cumplir hoy. Soy importante. 
Mi trabajo es escoger qué clase de día voy a tener.
Hoy puedo quejarme porque el día esta lluvioso o puedo dar gracias porque las plantas están siendo regadas.
Hoy me puedo sentir triste porque no tengo más dinero o puedo estar contento que mis finanzas me empujan a planear mis compras con inteligencia.
Hoy puedo quejarme de mi salud o puedo regocijarme de que estoy vivo.
Hoy puedo lamentarme de todo lo que mis padres no me dieron mientras estaba creciendo o puedo sentirme agradecido de que me permitieran haber nacido.
Hoy puedo llorar porque las rosas tienen espinas o puedo celebrar que las espinas tienen rosas.
Hoy puedo autocompadecerme por no tener muchos amigos o puedo emocionarme y embarcarme en la aventura de descubrir nuevas relaciones.
Hoy puedo quejarme porque tengo que ir a trabajar o puedo gritar de alegría porque tengo un trabajo.
Hoy puedo quejarme porque tengo que ir a la escuela o puedo abrir mi mente enérgicamente y llenarla con nuevos y ricos conocimientos.
Hoy puedo murmurar amargamente porque tengo que hacer las labores del hogar o puedo sentirme honrado porque tengo un techo para mi mente y cuerpo .
Hoy el día se presenta ante mi esperando a que yo le de forma y aquí estoy, soy el escultor.
Lo que suceda hoy depende de mi, yo debo escoger qué tipo de día voy a tener.
Que tengas un gran día… a menos que tengas otros planes.

viernes, 23 de agosto de 2013

Donde hay miedo no puede haber amor

Ella me engañó. 
Se inventó mil chorradas y yo, ilusa, me aferré a ellas, pues esperaba verlas llegar algún día.
En ese momento pensaba: "Esto tiene que ir en serio e irá para largo, que una chica de 30 años sabe lo que quiere perfectamente y seguro que es consecuente y sus palabras y sus actos se corresponden". En efecto, me volví a equivocar.
Al principio todo parece perfecto, mágico y maravilloso, tiene detalles conmigo, me dice lo que quiero oír, volvemos a la misma fecha de la primera vez...
Pero todo fue mentira, para camelarme, para tenerme ahí.
Se pueden decir muchas cosas, pero las debes acompañar de hechos, alguien que de verdad te quiere, se nota. Y sus hechos conmigo, lo único que hacían era hacerme daño, incluso sin estar conmigo me lo sigue haciendo, por tanto ahí se demuestra lo mucho que me quiere.

Para mí, personas como ella están destrozando esa palabra tan bonita al decir “te amo” con todos sus hechos de mierda detrás. Sólo de pensarlo me provoca arcadas, porque no tienen el puto valor de demostrar que sus palabras son ciertas. Una persona así, que ni cuida, ni valora, ni respeta no puede querer a nadie. No se puede querer de esa forma tan obsesiva, ni le puedes decir a la persona que amas que: "Ojalá te mueras".
Personas como ella que se alteran con facilidad, que bajo presión reaccionan agresiva e impulsivamente y que no piensa para nada en sus actos, ni en sus palabras, ni en todo lo que eso conlleva, te acaban pisando, destruyendo, devastando. Y sobre todo, cansando.
Lo peor de todo es que vuelve. Vuelve a buscarte de nuevo, como la que no ha hecho nada, como la que no entiende nada. 
Eres una cobarde por no decir todas esas cosas a la cara, es mucho más fácil ir llorando a los demás y limitarse a pedir perdón, dando pena y diciendo  "No volverá a pasar". Pero todo es otra jodida mentira porque lo hará de nuevo, si lo ha hecho siete veces, habrá una octava. Mejor no hagas ni digas cosas de las que después te puedas arrepentir porque el daño se queda hecho y un simple perdón no arregla nada. Es una maltratadora psicológica, una chantajista y una victimista. Esas cosas no se hacen si de verdad quieres a la otra persona. Y si ves que no puedes estar con ella porque le haces daño, ten el puto valor de largarte de su vida para siempre y no volver.

Tampoco mandes a tus amiguitas a marear. Ni pongas a la chica que amas de guarra para arriba, pues así lo único que haces, a parte de quedar como mentirosa, es demostrarme que das pena como persona, que no vales nada, que simplemente estás encabronada porque te he dejado con motivos más que de peso y en el fondo sabes que llevo razón.
Tú no me has querido nunca, para ti sólo he sido una posesión, como un "trofeo" y sólo te inventas chorradas para dejarme por los suelos delante de la gente, para quedar tú de buena, siempre de buena y yo como lo peor, para asegurarte de que por tus sucios comentarios pueda quedarme sola y que vuelva contigo (sinceramente prefiero estar sola). No hija no, te estás equivocando, eso no es amor, el amor es mucho más grande que todas las asquerosidades que tú haces y dices. Estás demasiado lejos para entenderlo siquiera.


¿Sabes? Incluso alguna vez he llegado a sentir miedo, y donde hay miedo, lo siento, pero no puede haber amor.

domingo, 30 de junio de 2013

Búscame

Cuando te apetezca, cuando notes que me echas de menos, cuando te mueras de ganas de tenerme a tu lado. Cuando no tengas a nadie que te diga un “te quiero” como yo, de los sinceros. Cuando eches en falta las risas, las sonrisas, las caricias que erizan la piel, las conversaciones sin rumbo, los abrazos inesperados y las locuras. Cuando necesites alguien que te sorprenda, cuando te des cuenta que nadie más tiene esos detalles contigo. Cuando quieras que te digan lo especial que eres, lo bonita que es tu sonrisa, lo bien que lo estás haciendo y lo guapa que estás cuando te concentras y cuando te desconcentras. Cuando quieras que alguien te motive y te anime a seguir adelante. Cuando mires el móvil esperando una llamada que no llega, cuando salgas y sin darte cuenta me busques con la mirada entre la gente. Cuando mis ojos felinos ya no te pidan guerra. Cuando las discusiones sean aburridas y los días rutinarios. Cuando las canciones carezcan de significado y las palabras no tengan sentido. Cuando recuerdes los buenos momentos y te arrepientas de no tenerlos ahora conmigo. Cuando eches de menos todo eso, entonces, búscame.


Te voy a decir algo

Mi vida se alistó hace rato para hacer maletas
y no será el viento quien me lleve.
Me iré sin temor, sin detenerme:
por una boca que esté lista,
por una piel que esté dispuesta,
por otras ansias que estén al tope.

sábado, 29 de junio de 2013

Ausencia

Ante todo, lo siento.
A esas personas que tanto me importáis y que he dejado bastante de lado últimamente.
Me siento en la obligación de aclararos el porqué de estar tan ausente estos días. Los motivos son simplemente que decidí encaminarme hacia la evasión y por poco hacia la autodestrucción. No se puede pretender pasar de todo cuando se está hecha mierda por dentro. Y sin embargo, al mismo tiempo he estado comiéndome mucho la cabeza, realmente por tonterías, pero me hacían estar mal. Y la gente que me conoce sabe que cuando estoy mal, me encierro en mi misma.
De modo que... lo siento, por preocuparos con mi actitud. Lo cierto es que no sé muy bien que hacer cuando me enfrento a situaciones como estas, en las que todo lo malo se te acumula, te agobias por todo y saltas a la mínima, pero la experiencia me dice que lo mejor es alejarse de todo, de lo malo para que no te afecte y de lo bueno para no afectarle tú. También sé exactamente qué personas de mi alrededor moverían montañas por mi y quien no movería ni un dedo. Gracias a los que pertenecéis al primer grupo, a los que vienen con ganas de sacarte una sonrisa y no de hundirte con más problemas. Gracias por entenderme cuando digo que no me apetece hablar.
Que sí, soy rara, pero no sé ser de otra manera y siempre es bueno sentirse comprendida. Que esas personas las cuento con los dedos de una mano y me sobran, pero me basta. No puedo deciros mucho más, simplemente que lo siento, que esto es algo pasajero y que trato de levantar cabeza. Todo objetivo que te propongas comienza dando un pequeño paso. En este caso soy yo quien debe darlo y sé que me costará. Agradeceré al que quiera quedarse a mi lado y el que venga a joder o a marear, que se vaya por donde ha venido.
Tengo ganas de volver a escribir, de distraerme, de estar motivada, pero hasta entonces creo que esto es todo lo que os puedo decir.

viernes, 7 de junio de 2013

Amor prohibido

Eres de esas pequeñas cosas que ya no pasan, 
de esas diminutas casualidades, minúsculas coincidencias, 
de esos momentos que se aparecen una sola vez en la vida 
y les da por desaparecer. 
Eres instante, eres sueños, realidad y coincidencia. 
Eres la fotografía en movimiento, tienes el arte en la sonrisa,
la danza al andar y la vida misma en tu mirar. 

Siendo consentidor conmigo mismo,
 tienes todo lo que merezco y lo que nunca podré tener."


lunes, 3 de junio de 2013

Más sombra, menos existente

Ella dijo: "Nunca dejaría de columpiarte". Sin embargo, lo hizo. 

Lo peor del caso es que la sensación que sólo ella conseguía causarme se quedó conmigo, bien clavada y no parece que pretenda abandonarme nunca. De hecho, muchas veces vuelvo a sentir sus manos balanceándome, pero son sólo un espejismo. No entiendo porque con lo lejos que está de mi, la sigo sintiendo. No entiendo porque no puedo olvidar algo que ha sido más ficticio que real. Y sobre todo no entiendo porque presiento que pierdo algo que jamás he tenido. Sigo aferrada al pasado, a un recuerdo, a ella. Pero ella me soltó y he estado esperando muchos meses su regreso, que no llega. Estaba claro, no se iba a quedar conmigo cuando ya tenia el corazón tan lejos, el pensamiento extraviado y la mirada esquiva. Yo me quedé callada, no porque no tuviera cosas que decirle si no porque fue más cómodo engañarme a mi misma. No hay más que decir, únicamente fingir una fortaleza de la que carezco. Ahora soy más sombra, menos existente. Quizás sea el momento de levantarme del columpio. Sé que fuera hay un mundo esperando por mi, pero las ganas de continuar en este lugar son demasiado grandes. Supongo que tendré que conformarme con el bonito recuerdo que me quedará cuando me gire a mirarlo y me quede embobada deseando que vuelvas, o cuando me invada la increíble sensación que tenía subida allí arriba, cuando tus manos seguían impulsándome.


lunes, 27 de mayo de 2013

Mosca puñetera


Ya sabes, como te he dicho anteriormente, que a día de hoy eres uno de los motivos que me mantienen en pie. Si no estuvieras en mi vida es muy probable que andara rogándole amor a una persona que quizás, con un poco de suerte, me ofrecería migajas. 
Sin embargo, no me hundo, no me arrastro, no cedo, gracias a ti.
No sabes cuánto alivias con tu risa mis preocupaciones. Te agradezco cada abrazo en el momento más oportuno, cada chorrada que has soltado solo para animarme. Gracias por formar parte de mi vida. Eres de ese tipo de persona con la que puedes contar, en las que puedes confiar, que te escucha y te consuela. Que da sin esperar nada a cambio. 
Eres un ángel. Invertido, pero ángel al fin y al cabo. 
Te has ganado en poco tiempo mi cariño más sincero. Gracias de nuevo. Por esas tonterías que me hacen olvidarme de todo, por cada palabra, por tu apoyo y tu estímulo. Por esos efusivos achuchones que tanto me gustan y por esos ojos verdes cargados de ternura. Gracias por darme la mano cuando todo el mundo me daba la espalda. Gracias por hacer que lo malo no parezca tan malo, por hacer que el tiempo vuele y por hacerme sentir tan a gusto y tan cómoda.
Espero que sigas siendo por mucho tiempo mi mosca puñetera.
Eres muy grande pequeña.

Dime que no lo cogerías


Si tuviera que pedir algo esta noche no sería nada más que tu presencia. Que rompieras este sobrecogedor silencio con uno de tus suspiros, mientras me envuelves en tus brazos. 
No podrías entenderme a menos que te adentraras en mis sueños, allí están mis actos más cobardes y mis tímidas palabras. 
He de reconocer que no me he atrevido a dejarme caer por completo en tu red, precisamente por el miedo intrínseco a tu reacción. Y que muchas veces no he logrado comprender tus inseguridades, que por consiguiente pasaban a ser mías también. 
Ahora, como en tantas ocasiones, me encuentro desorientada en medio de la nada, aguantando los impactos de un pasado amargo. 
Dicen que el tiempo todo lo cura, pero tu veneno... tu veneno sigue rondando bajo mi piel, muy profundo. 
Me queda la vaga ilusión de que algún día tu corazón escuche los lamentos del mío, roto, y venga a reconstruir sus pedazos, a sanar las heridas y a borrar el dolor de mi vida. Trato de luchar contra todos estos pensamientos que me invaden, contra mi propia conciencia, pero el corazón, estúpido, decide ir en otra dirección. Es tan difícil y cruel quererte tanto y al mismo tiempo tener que huir de estos sentimientos. Como si cada abrazo me quemara y cada beso me intoxicara, como si cada paso me guiara al vacío. 
Hace tiempo que decidiste limitar, por miedo a terminar heridas y sin embargo, aquí estamos, queriéndonos bajo techos distintos, sobre almohadas distintas. 
La mitad de mi sólo quiere echar a correr, dejar atrás esta situación, mas la otra mitad sigue esperando por tu complaciente regreso.
Sólo hazme un favor, échale un vistazo al camino que conduce hacía mi y dime que no lo cogerías, que no es lo que realmente quieres. 
Sé que no se trata de esperar a que aparezcan sentimientos por mi, si no de lograr que surjan, pero entiende que no puedo dar un paso en falso con tu indecisión dominando esta realidad.

viernes, 17 de mayo de 2013

He caído sola en esto

Lo siento, pero dejé de entenderte. 
Y me cansé de seguirte. Me cansé de intentar cruzar todos tus límites, tropezando cada día con la misma piedra. Me cansé de darlo todo por ti, para hacer que te sintieras segura y confiaras en mi, para que no soltaras mi mano. Murieron mis ganas con cada una de tus palabras. Me cansé de tus extremismos, de la bipolaridad que te invade, y conseguiste sacarme de quicio. Me cansé de preocuparme tanto por ti, de inventar pequeños detalles que tan poco te importaban. Me cansé de no verte, de no poder saber como era tu sonrisa, cómo bajabas la mirada cuando te ruborizabas o cómo sabían tus abrazos.
Cuando lo único que haces es esperar, el tiempo corre muy lentamente y consume tus energías, dejándote tirada, abatida y pensando en cada esquina. 
No puedo explicarte demasiado mi situación, porque por mucho que lo intente, todo se resume a que no entiendo tus idas y venidas, tus desequilibrios y tu caos. 
Estaba dispuesta a ser fonambulista en tu cuerda floja, pero tu misma me empujaste al vacío. La indiferencia por tu parte me hizo ver que no valía la pena seguir con esta farsa. 
Cada vez que volvías, me convencías. No obstante, tuve el valor necesario para quedarme contigo y aguantar lo que viniera. No salió bien. Que estuviera pendiente de ti te asustaba, no querías sentirte asfixiada ni agobiada, sin embargo nunca te exigí nada y aunque no lo creas, hace bastante que dejé de esperar algo de ti. Creo que no es el momento, que estás cansada antes de empezar, que ya nada te convence. He caído sola en esto. Pero ahora he decidido marcar yo el límite. Hasta aquí los días de desconcierto y tu locura transitoria. 
Como siempre, espero tu no-respuesta.


jueves, 9 de mayo de 2013

Risto Mejide


Antes que nada, perdona si huele un poco a cerrado, hacía mucho tiempo que nadie se alojaba aquí, y menos aún con la intención de quedarse.

Ábreme bien de puertas y ventanas. Que corra el aire, que entre tu luz, que pinten algo los colores, que a este azul se le suba el rojo, que hoy nos vamos a poner moraos.

Y hablando de ponerse, vete poniendo cómoda, que estás en tu casa. Yo, por mi parte, lo he dejado todo dispuesto para que no quieras mudarte ya más.

Puedes dejar tus cosas aquí, entre los años que te busqué y los que te pienso seguir encontrando. Los primeros están llenos de errores, los segundos, teñidos de ganas de no equivocarme otra vez.

El espacio es tan acogedor como me permite mi honestidad. Ni muy pequeño como para sentirse incómodo, ni demasiado grande como para meter mentiras y calamidades. Mis recuerdos, los dejé todos esparcidos por ahí, en cajas de zapatos gastados y cansados de merodear por vidas ajenas. No pises aún, que está fregado con lágrimas recientes, y podrías resbalarte. Yo te aviso.

El interruptor general de corriente está conectado a cada una de tus sonrisas. Intenta administrarlas bien y no reírte demasiado a carcajadas, no vayas a fundirlo de sopetón.

No sé si te lo había comentado antes, pero la estufa la pones tú.

Y hablando del tema, he intentado que la temperatura del agua siempre estuviera a tu gusto, pero si de vez en cuando notas un jarro de agua fría, eso es que se me ha ido la mano con el calentador. Sal y vuelve a entrar pasados unos minutos. Discúlpame si es la única solución, es lo que tenemos los de la vieja escuela, que a estas alturas ya no nos fabrican ni los recambios.

Tampoco acaba de funcionar bien la lavadora. Hay cosas del pasado que necesitarán más de un lavado, es inevitable. Y hay cosas del futuro que, como es normal, se acabarán gastando de tanto lavarlas. La recomendación, ensuciarse a su ritmo y en su grado justo. Eso sí, no te preocupes por lo que pase con las sábanas, que las mías lo aguantan todo.

Para acabar, te he dejado un baño de princesa, una cama de bella durmiente, un sofá de lujo y algo de comer en la nevera. Para que los disfrutes a tu gusto, eso sí, siempre que sigas reservando el derecho de admisión. Aquí no vienes a rendir cuentas, sino a rendirte tú. Aquí no vienes a competir con nadie, sino a compartir conmigo. Y lo de dar explicaciones, déjalo para el señor Stevenson.

El resto, no sé, supongo que está todo por hacer. Encontrarás que me sobra algún tabique emocional, que me falta alguna neurona por amueblar, y echarás de menos, sobre todo al principio, alguna reforma en fachada y estructura.

Sólo dime que tienes toda la vida, y yo voy pidiendo presupuesto.

miércoles, 8 de mayo de 2013

¿Qué haces cuando sabes que algo es malo para ti y aún así no puedes dejarlo ir?

Yo era ingenua, tu amor era como un caramelo,
dulce artificial, fui engañada por la envoltura.
Fui atrapada por tu red y aprendí cómo sangrar.
Fui una presa en tu cama y me devoraste completa.
Y lastimé mi alma porque no podía dejarte ir.
Todas las paredes se derrumbaban, no podía parar mi sufrimiento.
Odio mostrar que perdí el control.

Sigo yendo hacia atrás y lo único que necesito es alejarme de ti.

Debí haber sabido que fui utilizada para diversión.
No podía ver a través del humo. Todo fue una ilusión.
He estado lamiendo mis heridas, pero el veneno parece estar muy profundo.
Ambos podemos seducirnos, pero tú me tienes prisionera.
Estoy a punto de romperme, no puedo parar este dolor.
Soy adicta a tu encanto y estoy buscando una cura,
pero cada paso que doy conduce a otro error.

Sigo yendo hacia atrás y lo único que necesito es alejarme de ti.

No puedo reparar esto que tengo roto por dentro.
No obtengo nada con regresar, ¿qué hice para merecer esto?
El dolor de esta quemadura lenta me persigue a cualquier lado.

Sigo yendo hacia atrás y lo único que necesito es alejarme de ti.

Cada vez que trato de tomar aire, me sofoca la desesperación.
Esto nunca acaba.
Parece que nunca despertaré de esta pesadilla,
Rezo una oración en silencio para que esto termine. 
Por dentro estoy gritado, pidiendo, suplicando: no más.
¿Ahora qué hago? Mi corazón ha sido herido.
Y es tan triste como cierto, cada latido me recuerda a ti.


viernes, 3 de mayo de 2013

Ven, ven, ven.


Un millón de emociones, sólo dos corazones 
y una vida que compartir. 
Fueron cinco segundos y cambiaste mi mundo.
Faltan miles de historias para escribir contigo.

Ven ven ven.
Contigo quiero enloquecer. 
No tengas miedo, bésame.
Atrévete, no lo pienses.
Ven, ven, ven.
Contigo quiero despertar.
No tengas miedo de intentar, 
no te detengas y déjate llevar.

Cien por ciento seguro que encontré mi futuro.
¿Cuántas veces lo quieres oír?
Fueron cinco segundos y cambiaron mi rumbo 
Si tu quieres pasamos juntos una eternidad.
Ven ven ven.
Contigo quiero enloquecer. 
No tengas miedo, bésame.
Atrévete, no lo pienses.
Ven, ven, ven.
Contigo quiero despertar.
No tengas miedo de intentar, 
no te detengas y déjate llevar mi amor.

Regálame tu corazón.
Quisiera detener el tiempo y no decirte adiós. 
Ven... ven a mi.


domingo, 28 de abril de 2013

Ayer

Ayer pasó el pasado lentamente
con su vacilación definitiva,
sabiéndote infeliz y a la deriva,
con tus dudas selladas en la frente.

Ayer pasó el pasado por el puente
y se llevó tu libertad cautiva,
cambiando su silencio en carne viva
por tus leves alarmas de inocente.

Ayer pasó el pasado con su historia
y su deshilachada incertidumbre,
con su huella de espanto y de reproche

fue haciendo del dolor una costumbre,
sembrando de fracasos tu memoria
y dejándote a solas con la noche.

MARIO BENEDETTI


lunes, 22 de abril de 2013

Nunca dejaría de columpiarte.


¿Qué te pasa ?
- No sé como decírtelo.
- Intenta explicarlo,o ¿tampoco sabes, como de costumbre?
- Es difícil, pero lo intentaré. Siéntate en el columpio, hazme caso, solo así lo entenderás.
- Ya estoy en el columpio, ¿Ahora qué?
- Comienza a columpiarte y una vez cogido impulso cierra los ojos ¿Notas esas cosquillas en el estomago? A mí no me hace falta columpiarme para sentirlas. Las tengo cada vez que te veo, cada vez que me hablas, cada vez que oigo tu nombre.
- ¿De verdad? No sé que decir...
- No, pero aún no acaba.. ¡No abras los ojos! Sigue cogiendo impulso y suelta una mano.
- ¿Qué? ¿Tú quieres matarme?
- Hazme caso, confía en mi. Suelta una mano. ¿Has visto que sensación? Parece que te vayas a caer, se te corta el aire y se te acelera el corazón. Eso me pasa cada vez que te separas de mi, cada vez que te noto distante.
- Pero...
- No digas nada, no abras los ojos. Déjame impulsarte, y solo abre los ojos cada vez que estés arriba, y mira al cielo ¿Vale?
- ¿Y esto? ¿Cual es esta sensación?
- Solo contigo siento que toco el cielo, siento que vuelo.
- ¿Tanto me quieres?
- Nunca dejaría de columpiarte.

Cosas que no se borran y regresan. Como la marea.

Basta. Estoy fuera. 
De los recuerdos. Del pasado. Pero también estoy perdida. 
Antes o después las cosas que has dejado atrás, te alcanzan. 
Y las cosas más estúpidas, cuando estás enamorado, las recuerdas como las más bonitas. Porque su simplicidad no tiene comparación. 
Y me dan ganas de gritar. En este silencio que hace daño.
Basta. 
Déjame. 
Ponlo de nuevo todo en su sitio. Así. Cierra. Doble vuelta de llave. 
En el fondo del corazón, allí, en aquella esquina. 
Escóndelos bien, te lo ruego, donde no duelan tanto, donde nadie pueda verlos. 
Donde tú tampoco los puedas ver.

viernes, 19 de abril de 2013

Mi torpeza y la mala leche de después.


Después de tanto, he decidido que seas mi despiste y que sólo existas en las 
arrugas de mi cara, que formo en ocasiones especiales, 
cuando pierdo el autobús, las llaves o algún poema. 
Cuando me estampo contra algún cristal, tan transparentes son los cristales a veces...
Cuando escucho una canción quince veces. Seguidas. 
Ahí estás, reinando el laberinto de las noches en que no encuentro el cuarto de baño, 
cuando el mundo deja de ser algo conocido y me pierdo unos segundos. 
He decidido que seas mi torpeza y la mala leche de después. 
Ahí te he colocado, en mi cara de idiota, porque a las personas, cuando pasan por tu vida, tienes que ponerlas en algún sitio, saber qué fueron y acomodarlas. Porque luego unas serán un silencio mientras hablas sobre verduras, otras serán un suspiro mientras buscas el desodorante y otras, como tú, serán un berrido, un subliminal insulto a nadie después de meter el pie en el único charco que había en la calle.

No hay sirenas

Todos necesitamos algo que aporte un poco de magia para enfrentarnos a la arbitrariedad del mundo, algo que nos ayude a tapar los oídos, como Ulises.
Sólo que a veces, no es para no oír las sirenas, sino para no oír que no hay sirenas.


miércoles, 17 de abril de 2013

¿Te atreves?

Soy prohibida. Soy clandestina. 
Soy esa fiebre de tu ser. Soy el vicio de tu piel.
Soy caliente. Soy fría.
Soy una negación y una afirmativa.
Soy diversión. Soy satisfacción.
Soy aventura. Soy osadía.
Soy tu imaginación en la intimidad. 
Soy la llama que aviva tu fuego interno.
Soy tu castigo, tu perdición. 
Soy tu calma y tu agitación. 
Soy tus sentimientos más ocultos.
Soy tus sueños. Soy un privilegio. 
Soy placer. Soy pecado.
Soy ese nombre que jamás olvidarás.

martes, 16 de abril de 2013

Acuérdate de soltarlo.

Un psicólogo en una sesión grupal levantó un vaso de agua.
Todo el mundo esperaba la típica pregunta: ¿Está medio lleno o medio vacío? 
Sin embargo, preguntó:
- ¿Cuánto pesa este vaso?

Las respuestas variaron entre 200 y 250 gramos.
Pero entonces el psicólogo respondió: 
"El peso absoluto no es importante, depende de cuánto tiempo lo sostengo. Si lo sostengo 1 minuto, no es problema, si lo sostengo 1 hora, me dolerá el brazo, si lo sostengo 1 día, mi brazo se entumecerá y paralizará. El peso del vaso no cambia, pero cuanto más tiempo lo sujeto, más pesado, más difícil de soportar se vuelve."

Y continuó: "Las preocupaciones son como el vaso de agua. Si piensas en ellas un rato, no pasa nada. Si piensas un poco más empiezan a doler y si piensas en ellas todo el día, acabas sintiéndote paralizado, incapaz de hacer nada."


jueves, 11 de abril de 2013

"V"

¡Voilà! 
A primera Vista un humilde Veterano de VodeVil en el papel de 
Víctima y Villano por Vicisitudes del destino, 
este “Visage”, ya no más Velo de Vanidad, es un Vestigio de la 
Vox populi, ahora Vacua desVanecida. 
Sin embargo, esta Valerosa Visión de una extinta Vejación se siente reViVida 
y ha hecho Voto de Vencer el Vil Veneno de estas Víboras en aVanzada 
que Vela por los Violentos Viciosos y por la Violación de la Voluntad.
El único Veredicto es Venganza, Vendetta, como Voto, y no en Vano, 
pues la Valía y Veracidad de ésta un día Vindicará al Vigilante y al Virtuoso. 
La Verdad, esta Vichysoisse de Verborrea se está Volviendo muy Verbosa. 
Así que sólo añadiré que es un Verdadero placer conocerte 
y que puedes llamarme "V".